La niñera dominicana Joselyn Ortega (Josie) de 50 años de edad y quien supuestamente habría asesinado a dos niños que estaban a su cuidado en un apartamento de la calle 75 en el centro de Manhattan, despertó del coma inducido en el que la mantenía los médicos.
Un tubo de respiración artificial le fue desconectado y la dominicana pudo articular algunas palabras, pero el aparato le volvió a ser conectado para mayor estabilidad.