En 1986, la cadena cambia su nombre de SIN a Univisión y dos programas comenzaron su emisión: Mundo Latino y Sábado Gigante, desde los estudios en Miami.
Sábado Gigante era conducido por el actor cubano Rolando Barral, y el en ese entonces desconocido Mario Kreutzberger, "Don Francisco". Bajo el eslogan "El mejor pretexto para quedarse en casa", Sábado Gigante comenzó su camino de éxito.
Barral fue cambiado a otro programa y el irreverente Don Francisco se convirtió en la mayor estrella de la red.