Su felicidad era visible y su agradecimiento era externado con humildad, por los alimentos y donaciones recibidas. El apoyo de los dominicanos que residen, tanto en el exterior como en el país, y de algunas instituciones públicas se ha dejado sentir en la destartalada vivienda de la familia Rivera, la cual podrá decir que tuvo “una inolvidable Nochebuena”.
“Mamí uva, uva, uva... Mamí salamí, dulces, manzanas”, eran las palabras que con alegría pronunciaba una y otra vez el vástago de Altagracia y Ventura Rivera, Luis. Su impresión no podía ser mayor, y que a pesar de tener 7 años, el infante nunca había visto tanta comida en su estrecha casa.
Luego de un reportaje de LISTÍN DIARIO, los alimentos y la ayuda económica comenzaron a fluir en la casa, ubicada en el sector La Fe, de Los Alcarrizos, municipio Santo Domingo Oeste.
Con una sonrisa en su rostro, la emoción de recibir una mano amiga, saber que tenía los alimentos necesarios y suficientes para poder brindar una cena de Nochebuena a su hijo Luis y el nerviosismo en cada llamada de teléfono, Lilo como también es conocido Ventura Rivera, no paraba de dar las gracias.