POR JOSEPH TAVÁREZ
Procesadora San Martín de Porres cometió un grave error en querer justificar la venta de productos vencidos el domingo 16 del presente mes, durante el cierre de Expo - Cibao 2012.
La publicación que hacen con ridículos argumentos pone en evidencia la incapacidad que tienen para admitir un peligroso descuido o una falta arriesgada.
DICE LA EMPRESA: "En el caso del gandul concretamente la vida útil después de enlatado el producto es de tres a tres años y medio. Sin embargo, Productos Mamá para una mayor garantía a los consumidores solamente establece 2 años para el vencimiento del producto"
ADMITEN ADEMÁS QUE: "De lo sucedido en la Feria Expo Cibao 2012; en la tarde del domingo 16 de septiembre se agotaron los gandules disponibles para vender en la Feria, por lo que se envió a un empleado de confianza a la empresa a buscar más productos; dicha persona no es el encargado de almacén y por ende no conoce la ubicación de las devoluciones, retiró dos cajas de gandules vencidas en marzo 2012 destinadas a ser evaluadas en el laboratorio de control de calidad y por error las llevó a la Feria".
Es sin dudas insensato proyectar estas descabelladas tesis ante una postura con carácter social y que trata de riesgos innecesarios para una población que confía en la calidad de sus productos.
Un absurdo innecesario pone de manifiesto una burla comercial y si este señor hubiese llevado guandules tóxicos, también son capaces de inventarse una historia estrafalaria para justificar su maldito error.
Una empresa como esta debe ser investigada de inmediato y las autoridades proceder correctamente, aplicando un escarmiento disciplinario a fin de que asuma con la formalidad que encarna lo sucedido.
La venta de productos vencidos no se puede defender con imprudencias, el concepto de respeto al consumidor tiene que obedecer a un juicio decente, honesto y mesurado.
