Rafael Hipólito Mejía en su gobierno que tuvo se esmeró en ganarse la aureola de ser un padrino de los personajes más corruptos y derrochadores que han aparecido en su administración.
Apoyó a su cuñado Sergio Grullón.
Secundó a Juan Vargas.
Respaldó a Silvio Carrasco.
Protegió a Lalane José, quien en el caso de la corrupción del subsidio del gas propano salió a relucir que se hizo de una envasadora de gas licuado en Samaná con un capital de 50 millones de pesos.
Fué el padrino de Vargas Maldonado, del que es socio y familiar, puesto que una hermana de Vargas Maldonado es la esposa de uno de los hijos de Rafael Hipólito Mejía.
Ahí están los casos de las comisiones recibidas por funcionarios palaciegos por los préstamos adquiridos por el gobierno de Rafael Hipólito Mejía.
Pero también están en el aire que ya van tres ayudantes y asesores de Rafael Hipólito Mejía muertos por estar vinculados a asuntos podridos.
Y Abreu Pimentel, fue quien le obsequió una yipeta al Consultor Jurídico, Gómez Mazara.... Y luego fue asesinado.
...Se atreve este tipo hablar de corrupción?