Hace más de 20 años que el actor costarricense Rafael Rojas irrumpió en la pantalla chica con su personaje de Mario Castro, la pareja de Teresa, que entonces estaba encarnada por Salma Hayek.
De ahí en más, todo parecía éxito y fortuna para el moreno de ojos azules.
Las mujeres hacían fila en los foros de Televisa para sacarse fotos con Rojas. A partir de ahí llegaron papeles como el de Bruno Ventura en Baila conmigo, en 1992, donde compartió escena con Paulina Rubio. Más de una veintena de roles se le encargaron a Rojas, aunque no todos como protagonista.
Rojas tuvo que ver su carrera apagarse de a poco y los papeles de galán fueron disminuyendo a medida que crecían sus adicciones al alcohol y las drogas.
En 2006 tuvo una aparición en Duelo de pasiones. Rojas, ya con 50 años, trabaja todo pintado y luce con varios kilos demás.Con un Volkswagen Sedan desvencijado de donde saca ropa, cinturones y artesanías elaboradas a mano para vender en plazas de México .