Al tema de la muerte de Heriberto Lazcano Lazcano, cuyo cadáver desapareció de las manos de la justicia, se le suma un detalle: eran tres los delincuentes ante quienes efectivos se enfrentaron en Progreso, Coahuila; dos terminaron abatidos, el Lazca y Mario Alberto Rodríguez; y uno más huyó.
El golpe más contundente al narcotráfico en dos sexenios, se da en medio de una serie de inconsistencias cuyo extremo es el que, simplemente, el cuerpo del capo se esfumó.